jueves, 13 de julio de 2017

CARTA A MIS APRENDICES

CARTA A MIS APRENDICES
Cómo empezar algo que nunca pensé en escribir. Hasta que me surgió la inquietud, frente a qué puedo decir a mis aprendices, más no qué les puedo enseñar.
Primero que lean, que escriban y que no crean, sino en sí dentro de un mundo-pluriverso. Segundo que sean libres y emancipadores, conscientes de sentir con el corazón y amar, a sí y a los otros-sí. No hay que creer en los/las maestras, hay que cuestionar, criticar y filosofar, lo que construimos y experimentamos (experiencias educativas) con el maestro/a.
Deben soñar, y luchar por alcanzar lo que sueñan, no importa nada más. Siempre que eso aumente nuestras libertades emancipadoras.
Aprehende tu consciencia  y cúbrela con el corazón. Que las acciones sean voluntarias y de convicción, de vocación y no de imposición cosificante y alienante. 
No seas nada superior a la sociedad sé la sociedad misma, en su devenir y constante mejoramiento. Que venga a la escuela con felicidad y preguntas, con deseo de aprender del mundo mismo. Sus flores, sus ríos, sus montañas, sus animales, mi humanidad.
El fundamento y el sentido de la libertad es su diploma, el elegir y la esperanza, el responsabilizarme del futuro más próximo y de mi ser-prójimo. Busca más oportunidades de las que aparecen.
Cada uno/a es diferente, pero necesario/a para el otro/a. Haz la tarea, pero ve más allá, aprende a ser responsable y comprometido/a con tus sueños y los sueños de tus otros-yo. Un sacrificio de felicidad. Construye la sociedad que sueñas, llena de bienestar y sostenibilidad en un mundo limitado.
Aprende a escribir para que multipliques los receptores de tu expresión, siempre sin trasgresión del otro-sí pero siempre traspasando límites impuestos e inventados para vedar caminos del encuentro inacabado del sí.
Sean lo que quieran ser, pero por sí mismos/as y contribuyendo que los otros sean por sí, sin generar mayor conflicto del que por naturaleza debe mover el ser; siente, piensa, ríe, llora, enamórate, desenamórate, busca, pierde, encuentra, inventa, descubre,  crea, pregunta, duda, afírmate en tu angustia del ser, para trascender en la existencia deja mejor el mundo de cómo te lo entregaron, el mundo es todo, cultura, sociedad, política, economía, religión(es), ética, etc.
Sé la esperanza. Agradece y nunca te rindas por más inanición que exista, al fuerza del guerrero/a se mide en la batalla no en la victoria. Que piense en inglés como globalización del mundo, que valore la lengua castellana como medio de expresión de sí. La matemática para multiplicar los beneficios sociales, Historia para saber cómo estoy y por qué estoy como estoy y hacia a dónde voy; el arte para aproximarse a los sublime, la tecnología para superar diferencias humanas, Ed. Física para cuidar la salud física o descubrir su don-deportivo, religión para encontrar el alma (esencia) de sí, ética para saberse múltiple y complejo e inentendible, ciencia para valorar el mundo y filosofía para englobar y relacionar todas las experiencias educativas con proyección a la resistencia y transformación de las falencias sociales hacia el suplir de forma cabal las necesidades de las comunidades y su ecología.
Piensa en grande. Atrévete a saber. Atrévete a pensar y a decir, llega lejos y más lejos de lo lejos, aprende a conocer. Sé, vive y (re)existe. Goza la amistad y la enemistad, disfruta la lluvia y el calor, aprende en el juego y busca la seriedad en el aprender, sé disciplinado en tu atender y abre los sinfines de tu mente hacia los sinfines del universo, encuentra el cosmos en tu interior y mírate como un cosmos que comprende el cosmos, ayuda a pensar y busca siempre la verdad, la belleza y la justicia, como pilar para la real realidad de los sueños…
Con amor cariño y cuestionamiento, el no-maestro… QuinCHE…




miércoles, 12 de julio de 2017

DOCENTE Y DISCENTE

DOCENTE Y DISCENTE

Hacia la ciudadanía mundial

De la nada, hacia la nada, mientras existir.
(Quinche)

            Este trabajo está fundado bajo los conceptos y las ideas adquiridas con la lectura de la introducción y primer capítulo del texto de Martha Nussbaum llamado: El cultivo de la humanidad. Una defensa clásica de la reforma en la educación liberal. Pretende mostrar una necesidad ineludible tanto para el/la docente y el/la discente (aprendiz), pensar por sí mismo con miras a un sentir, pensar y hacer-en-el-mundo, para poder-ser-ciudadano/a-del-mundo.
            El/la docente debe salir de la caverna y volver por sus discentes, para que así ellos vuelvan por la raza humana. Salir de la caverna para saberse-en-el-mundo y a partir de ello estar-en-él. No un simple <<estar>> como una piedra, sino un estar en constante reflexión frente al lugar que se ocupa en-el-mundo, y lo que se debe hacer con ese espacio único que se ocupa. El/la docente debe ser ese Sócrates que cuestiona. No sólo por cuestionar o porque posea la verdad, como quien posee un tesoro, sino para que se encuentre a sí por medio de sus propias indagaciones sobre-el-mundo. El/la docente debe educar en “la argumentación [ya que] no sólo proporciona a los estudiantes razones para hacer esto y lo otro; también ayuda a hacer más probable que actúen de cierta manera, y por ciertos motivos” (Nussbaum. M. 201?. P. 52) no es sólo saber, saber-hacer sino querer-hacer, el/la docente más allá de educar integralmente y con calidad a sus discentes debe motivarlos a vivir-en-el-mundo, “en este muy radical sentido, produce personas que son responsables por sí mismas, personas cuyos razonamientos y emociones están bajo su control. (Nussbaum. M. 201?. P. 52) así no sólo se educa para una labor-en-el-mundo, sino para que se sienta-parte-del-mundo y así asuma la responsabilidad inherente a la raza humana, frente a sus semejantes y frente a la necesidad de pensar-en-sí-en-el-mundo. Para darse cuenta de  su <<mundialidad>> y de su ser representante de la raza humana y la humanidad. Aunque sea “difícil, dentro de una cultura tradicional, concebir una educación que promueva la libertad racional.” (Nussbaum. M. 201? P. 52) Por ello, es el/la docente el encargado de aguijonear no solo al discente (en tanto posibilite mejores políticas educativas). 
La educación como acción genera un resultado. No solo se debe educar en base  al currículo, se debe tender “a considerarla como un tipo de educación superior […] el punto de vista de que la educación superior es una parte esencial de la realización personal de todo ser humano. (Nussbaum. M. 201? P. 53) Ésta educación “superior” debe ser ejecutada desde el inicio mismo de la educación, en este caso formal, se debe educar en base a la reflexión sobre sí mismo/a. En base a que se piense por sí mismo/a. Sobre el fundamento de aprender a defender mis creencias, ideales, proyectos, cultura, bajo la capacidad misma de poderlos argumentar, pues en la argumentación lógica es en donde recae la validez de dicha postura o forma de vida. Desde los grado de preescolar ya el niño/a piensa sobre sí en tanto las cosas que quiere y no quiere. Por ello es importante que entre más pronto se eduque en pensarse será mejor la realidad mundial. Así:
La educación superior puede generalizarse porque es el desarrollo de los poderes de razonamiento práctico que cree atributo de todos los ciudadanos; y puesto que está íntimamente relacionada con la ciudadanía y la familia, su generalización no amenaza, sino que promete fortalecer la comunidad política democrática. (Nussbaum. M. 201?. P. 53)
Una de las problemáticas educativas es la cantidad de discentes por aula. Ello permite un desarrollo lento de las habilidades y destrezas críticas necesarias para vivir-en-el-mundo. Pues “la educación debe ser muy personal” (Nussbaum. M. 201?. P. 54). Entre más personal mejor la calidad de los aprendizajes y de las habilidades y destrezas para pensar-por-sí-en-el-mundo. Ello permite “preocuparse de la situación real del alumno, del estado de sus conocimientos y creencias, de los obstáculos para que ese alumno (discente) alcance la introspección y la libertad intelectual.” (Nussbaum. M. 201?. P. 54) que es fundamental para alcanzar la libertad cultural, es decir la autonomía de las acciones-en-el-mundo. “Para esto, Sócrates interroga a las personas una por una. […] la instrucción individualizada siempre es, en principio, el objetivo.” Ello permite a su vez una mejor interacción entre las capacidades y habilidades tanto del/la docente como de/la discente para comprender así la complejidad del mundo-en-sí-mismo, pues:
La educación es para el alma lo que es el arte de la medicina para el cuerpo. Así como los médicos se desempeñan bien sólo si son sensibles a las verdaderas condiciones y síntomas de sus pacientes, lo mismo ocurre con el profesor. (Nussbaum. M. 201?. P. 54)
La realidad del/la docente es no sólo brindar herramientas para aprender, “como dijo Heráclito hace dos mil quinientos años: <<Aprender sobre muchas cosas no da lugar al entendimiento>>”  (Nussbaum. M. 201?. P. 117)  así como cuando
Epicteto le dice que parece un atleta que llega diciendo jubilosamente: “Mirad, tengo un nuevo conjunto de pesas de entrenamiento en mi habitación”. Esta persona, prosigue, no obtendrá como respuesta: “Magnífico, lo has logrado”. La respuesta que recibirá es: Qué bien, muéstrame lo que puedes hacer con tus pesas. (Nussbaum. M. 201?. P. 54)
No es sólo saber, es también saber-hacer, querer-hacer y hacer-lo-propio, pues “así también con el estudiante: muestra que puedes usar lo que lees para pensar bien y para asumir tu propio razonamiento.” (Nussbaum. M. 201?. P. 54) No sólo para saberse o saberse-en-el-mundo, sino para saber que existen otros-en-el-mundo. Y que tienen las mismas necesidades como raza humana-en-el-mundo.
Hay que enseñar que “una cosa es recordar, otra saber. […] Pero saber es hacer propia cada cosa. No depender del texto y siempre recordar al profesor. «Zenón dijo esto, Cleantes dijo esto.» Deja que haya una distancia entre tú y el libro”. (Nussbaum. M. 201?. P. 54) que no se enseñe a repetir de memoria como loro sino a pensar, no el qué sino el cómo o <<cómos>>. Pues cada uno es un-ser único-en-el-mundo. No hay que olvidar que “un maestro dedicado puede aguijonear el pensamiento de los estudiantes” (discentes) (Nussbaum. M. 201?. P. 66) debemos los y las docentes “una vez más, como Sócrates, (estar) bajando la filosofía desde los cielos a la tierra. (Nussbaum. M. 201?. P. 66) Saber que el pensamiento, es distinción de la raza humana, que el sentir es inherente al ser humano, el hacer es el origen mismo de la humanidad, por ello los/las docentes y los/las discentes estamos llamados a pensar ya no solo en sujeto-dentro-de-un-mundo, sino en ciudadano-del-mundo, responsable de sí mismo/a y del mundo, somos responsables de la pobreza, de la desigualdad, de las injusticias económicas, culturales y políticas, de las guerras, de las enfermedades, de la violencia, de los sistemas de salud, de la intolerancia, de la pérdida de valores, de los Estados, del comercio, del consumo, de la familia, de la vida, de la naturaleza, de una mariposa.
La raza humana tiene el poder de transformar y ha ejercido ese poder, pero lo ha ejercido para el deterioro del mundo. Ahora los/las docentes y los/las dicentes tenemos el poder de resistir y transformar. Si no se asume con compromiso y responsabilidad, con amor e interés, no se podrá por más Sócrates que se lee, se aprenda, se memorice, y hasta se hable como él, las cosas serán cada vez más difíciles. Es bueno saber del mundo pero es bueno saberse-en-el-mundo y que todas sus acciones y no-acciones tendrán consecuencias en el mundo. Hay que enseñar la condición de ser-mundial.



BIBLIOGRAFÍA
Nussbaum, Martha. El cultivo de la humanidad. Una defensa clásica de la reforma en la educación liberal. 201?. Sociología de la Educación (Universidad Autónoma del Estado de Morelos)